Pues bien, quise hacer una lista de las mejores cosas que me pasaron en este año que está a punto de terminar, y aunque de seguro me faltarán muchas, aquí están las que más recuerdo:
-Dante se graduó del jardín de niños y entró a la primaria.
-Casi no nos enfermamos. De hecho, Dante sólo fue una vez al pediatra porque le dio varicela.
-Vi varios documentales que me dejaron marcada de por vida, espero que para mejorar: Invisibles, Earthlings, La dignidad de los nadies, entre otros.
-Mi viaje a Culiacán. Aparte de lo chido que es viajar, y de lo bueno del taller, el regreso fue muy especial. Me di cuenta de que estoy muy enamorada y que el Bern me extrañó tanto como yo. No cabe duda: trabajar juntos no nos ha hecho enfadarnos uno del otro, sino al contrario, no nos imaginamos por separado.
-Dejé de comer huevo.
-Aprendí a hacer bien el gluten y a cocinar algunas cosillas más.
-Me siento más relajada y menos corajuda.
-Dante bailó en su kermés. Dante! Bailó! Déjenme decirles que mi hijo no bailó nunca en guardería ni en el jardín (sólo en su graduación, pero no con muchas ganas). En la kermés bailó con mucha emoción, y lo hizo super!
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