1.-A hacerse veggies. Y me refiero a vegetariano austero, sin lujitos primermundistas como salchichas-tocino-nuggets-hamburguesas vegetarianos, tan deliciosos y re-caros. Pura rama.
2.-Nada de sky ni interné. A ver los cinco canales para mortales. A robar señal si tienes laptop, (y si es que no la tiene uno que empeñar)
3.-Adiós a la dignidad: no hay pecado ni humillación en usar cosas de segunda. La ropa se lava, los muebles se pintan y reparan. A mí me gusta estrenar cosas aunque sean viejas, y siempre puede haber alguien al que le sirva lo que uno cree que ya no sirve.
4.-A bajar películas y comprar maíz palomero, hacer agua de limón y listo! miércoles (o viernes, o el día que desees) de cine. Sin pagar entrada, echados cómodamente en la cama, o en el piso.
5.-Las tardes otoñales se prestan para hornear. Consigue unas buenas recetas y prepara tu pan, tus tortillas, galletas para mandarle de lunch al niño. Y dile adiós a los h. d. p. de Bimbo.
6.-Compra jamaica por kilo y haz agua. Olvida para siempre tus refrescos.
7.-Aprende a hacer juguetes de material reciclado. Cajas de cartón, tubos de papel de baño, taparroscas, son buenos materiales para trabajar con los niños. A falta de juguetes caros, hacerlos en casa.
8.-Búscate un talento y explótalo. Hay que corretearle, ni modo. En estos momentos, hacer manualidades, cantar en las calles, hacer buenos masajes, ser bueno para lavar o planchar. No hay nada vergonzoso mientras sea honesto.
9.-Haz los regalos para los cumpleaños venideros. Piensa en cosas útiles. El internet abre muchas posiblidades, busca páginas de Cómo hacerlo uno mismo, y adelante.
10.-En la casa siempre hay cosas que hacer, con tal de no salir y gastar gasolina. Ni modo, a platicar con tu esposo o esposa, a jugar con los chamacos, o pasear a los perros.
3.-Adiós a la dignidad: no hay pecado ni humillación en usar cosas de segunda. La ropa se lava, los muebles se pintan y reparan. A mí me gusta estrenar cosas aunque sean viejas, y siempre puede haber alguien al que le sirva lo que uno cree que ya no sirve.
4.-A bajar películas y comprar maíz palomero, hacer agua de limón y listo! miércoles (o viernes, o el día que desees) de cine. Sin pagar entrada, echados cómodamente en la cama, o en el piso.
5.-Las tardes otoñales se prestan para hornear. Consigue unas buenas recetas y prepara tu pan, tus tortillas, galletas para mandarle de lunch al niño. Y dile adiós a los h. d. p. de Bimbo.
6.-Compra jamaica por kilo y haz agua. Olvida para siempre tus refrescos.
7.-Aprende a hacer juguetes de material reciclado. Cajas de cartón, tubos de papel de baño, taparroscas, son buenos materiales para trabajar con los niños. A falta de juguetes caros, hacerlos en casa.
8.-Búscate un talento y explótalo. Hay que corretearle, ni modo. En estos momentos, hacer manualidades, cantar en las calles, hacer buenos masajes, ser bueno para lavar o planchar. No hay nada vergonzoso mientras sea honesto.
9.-Haz los regalos para los cumpleaños venideros. Piensa en cosas útiles. El internet abre muchas posiblidades, busca páginas de Cómo hacerlo uno mismo, y adelante.
10.-En la casa siempre hay cosas que hacer, con tal de no salir y gastar gasolina. Ni modo, a platicar con tu esposo o esposa, a jugar con los chamacos, o pasear a los perros.
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no gracias